7 ERRORES EN PLANIFICACIÓN FINANCIERA

 1. No elaborar un presupuesto 50/30/20 (http://www.ladoeconomico.com/2015/05/presupuesto-50-30-20.html) Hacer un presupuesto es tan simple como agarrar un cuaderno, un lapicero y comenzar a trasladar los ingresos, egresos y capacidad de ahorro. La utilidad de este sistema es que tendrá las cuentas claras y podrá programar mejor sus gastos y hacer más eficiente el ahorro.

 2. Comprar a plazos para pagar el mínimo o sacar efectivo con la tarjeta de crédito para hacer carrusel. Gran error de muchas personas. Al consumir con tarjeta de crédito, la gente piensa que se trata de su propio dinero y utilizan este plástico sin control. Lo que no se dan cuenta es que están generando una deuda que puede convertirse en algo incontrolable y peor si solamente pagan el monto mínimo. Otro craso error es retirar efectivo de la tarjeta de crédito para pagar otras deudas. Haciendo esto, está formando una gran “bola de nieve” que le traerá muchos problemas financieros a futuro.

 3. Tener deudas con demasiados bancos y en una moneda que no sea la de los ingresos. Cuando una persona se endeuda debe en primer lugar analizar su capacidad de pago y en segundo término, hacerlo en lo posible, en la moneda que tiene sus ingresos. De esta manera no tendrá problemas con el tipo de cambio. Por otro lado, lo más eficiente es no tener deudas en demasiados bancos. Lo recomendable es tenerlas con una sola institución financiera pero si esto no es posible, mi sugerencia es no exceder de dos.

 4. No prestar atención a los gastos superfluos del día a día, también llamados gastos hormiga. Ponga mucha atención en estos gastos, aunque no lo crea son desembolsos diarios que a la hora de percatarnos, significa un porcentaje importante a tener en cuenta de nuestros ingresos. Qué hacer? muy sencillo, en primer lugar identifíquelos, luego haga una suma de todos  y por último elimínelos. De no poder eliminarlos en su totalidad haga un esfuerzo para reducirlos a su mínima expresión. No sabe la sorpresa que se llevará a cuánto ascienden estos gastos. Algunos ejemplos, el cafecito, cigarrillos, galletas, gaseosas, caramelos, etc. consumidos diariamente.

 5. No tener un plan de ahorro, un seguro de vida y un seguro médico. No toda la vida seremos jóvenes y a medida que pasen los años las fuerzas nos van dejando y la capacidad de ahorro también se va esfumando lentamente. Haga un compromiso con usted mismo y póngase una meta de mediano a largo plazo. Para que necesita esto? Bueno lo puede usar para la educación universitaria de sus hijos, su jubilación, la compra de algo importante, etc. Mientras más rápido comience más éxito tendrá. Que tiene que hacer? Pensar en un monto a determinado tiempo y luego hacer el cálculo para tener claro cuánto sería la cuota mensual a ahorrar. Esta cuota tiene que estar de acuerdo a sus ingresos. Respete su plan y cúmplalo hasta el final, verá la satisfacción que tendrá. Por otro lado, si  no tiene un seguro de vida o seguro médico, no espere más. Existen en el mercado varias compañías locales e internacionales que ofrecen estos tipos de seguro. Uno nunca sabe el destino de nuestras vidas. Proteja a la familia, protéjase usted mismo.

 6. No tener una idea clara antes de tomar una decisión financiera. Cuando uno va de compras lo primero que hace es preguntar el precio final del artículo, es decir, el valor venta más todos los gastos adicionales que pueda incurrir el producto, por ejemplo, impuestos, gastos de envío, etc. Bajo esa perspectiva, cuando solicita cualquier producto financiero, tiene todo el derecho de preguntar cuál es la tarifa o tasa de interés anual final. Entonces solicite un préstamo preguntando sobre la TCEA. Esta tasa le indicará cuanto le están cobrando realmente por el crédito. Al contrario, si está llevando su dinero a alguna institución financiera, solicite la TREA, ya que esta tasa le mostrará lo que le pagarán exactamente por sus ahorros.

 7. Nunca ser aval de un amigo o familiar. Existe un dicho antiguo que dice: caras vemos, corazones no sabemos. En este caso aplica efectivamente. Muchas veces se han roto relaciones familiares y amicales por querer ayudar y lo peor de todo es que malogra su crédito en el sistema financiero. Lo recomendable es nunca ser aval de nadie. Evítelo. La sugerencia es que lo haga con elegancia para evitar conflictos.

Nota: Actualmente se puede encontrar mucha información financiera a través de internet inclusive comparaciones entre distintas instituciones financieras. 

Manuel Lozano

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